Se fue el Dios del fútbol Argentino, dejó las canchas para iluminar el cielo con su Gloria.
Sus goles lo llevaron a la gloria, su estilo particular lo postuló como el mejor del mundo, el que con sus pies tocó lo más alto de los cielos, salido de potreros y canchas en sus inicios en el fútbol.
Controvertido en su vida, pero hoy sus gambetas no pudieron sacar el paso a la muerte, ese destino hoy se plasmó en una triste realidad.
El astro del fútbol Argentino, murió este miércoles 25 de noviembre a sus 60 años, después de sufrir un paro cardiorrespiratorio en su vivienda en San Andrés, en el partido bonaerense de Tigre, donde vivia hacia algunos días.
Pese a que al lugar llegaron 4 ambulancias los paramedicos no pudieron reanimar al exfutbolista y capitan de la selección Argentina.
El campeón del mundo con la selección Argentina se descompensó, recordemos que había sido operado de la cabeza, hacia algunos dias y se recuperaba de la cirugía.
El diez se fue, deja un sin sabor en los seguidores del fútbol y una marca imborrable de su vida tanto dentro como fuera de las canchas.
Siempre era noticia por sus actos, sus gambetas y goles lo ubicaron en un lugar especial para los hinchas, su zurda gloriosa lo llevó a varios mundiales, pero su mano también lo ayudó a hacer goles y después a cargar la copa mundial.
Adiós al Dios, el que se resignaba a dejar el futbol, el que se transformaba en la cancha y decepcionada por sus actos de indisciplina. Toda una leyenda queda plasmada en un recuerdo que siempre llevarán sus seguidores en lo más profundo de sus almas.
El astro dejó las canchas, para iluminar los cielos con su gloria.