Las bateas y las poncheras, fueron reemplazadas por lavadoras automáticas

Todos los días don José Germán prepara sus fuerzas para subir en su carrera las lavadoras automáticas que alquila para poder llevarlas a los clientes que eligen su servicio a domicilio, desde su vivienda ubicada en el barrio Nuevo Majagual en Sincelejo.

Y es que con la innovación de la sociedad y la evolución del mundo, don José aprovechó para comprar varias lavadoras y emprender su negocio de alquiler que lleva hasta las viviendas de quienes lo requieren.

«Diariamente no salen, hay días que salen y hay días que no y así respectivamente tres, dos, cuatro y de allí no pasa. Hay que sobrellevar las cosas y repartir el billetico que entra», dice don José Miguel Germán, alquila lavadoras.

A falta de oportunidad laboral empezó su propio emprendimiento para ganarse la vida desde hace tres años, sin embargo hay veces que le toca invertir más en el arreglo de las lavadoras por averiaciones en manos de sus clientes, que los tres mil pesos que recibe por cada hora de alquiler.

«Yo les digo la voy a mandar a arreglar y tiene que colaborarme con lo que cobre el mecánico, hay unos que no, se hacen las orejas sordas, mejor no me llaman más», dice don José.

Los tiempos de lavar a mano y con toda la fuerza del pulmón quedaron atrás para las mujeres que cuidan de su familia y del hogar, quienes piden los servicios de lavadoras automáticas para evitar desgastarse en lavaderos tradicionales elaborados artesanalmente, aunque no es muy rentable vivir del negocio.

«No es rentable porque tengo que estar remendando aquí y allá para poder cumplir con el diario que haya que hacer en el día», asegura don José.

La batea y las poncheras que utilizaban las mujeres para lavar la ropa, son tiempos de otroras, con la llegada de las lavadoras automáticas reemplazaron la fuerza de las manos de valiosas madres de antaño que cumplían con el compromiso de tener las prendas de vestir limpias, hoy solo activan un botón de encendido con uno de sus dedos para que la vida les de vuelta mientras hacen otros oficios.