Estudiantes de Guaranda aún no inician clases, por aulas inconclusas
Luego de que iniciará el calendario escolar los estudiantes de la Institución Educativa de Guaranda (Instegua) no han podido iniciar clases porque el Fondo Adaptación aún no termina la construcción de nuevas aulas.
Según los padres de familia la entrega de las aulas ha sido aplazada tres veces, por lo que exigen al consorcio que finalice la obra para no seguir perjudicando a los estudiantes.
«Y por parte de Findeter, con recursos de Gobernación, también tenemos unas aulas que están en plena ejecución para preescolar y no vemos, igualmente, ninguna solución para esa entrega», añadió Anderson Durán.
De igual manera los padres de familia reclaman la solución de la problemática porque aseguran no hay las condiciones mínimas para las actividades académicas.
«No se cuenta con las sillas necesarias, hay mil 1400 matriculados y hay un déficit de 800 silla. ¿Qué hacemos con esos estudiantes? ¿Dónde los vamos a recibir?», cuestionó.
Por su parte Benjamín Amarís, otro padre de familia, consideró que lo que ocurre es una irresponsabilidad y aseguró que la obra está atrasada porque desde noviembre no se ven trabajadores.
«Hacemos un llamado al presidente, al gobernador, a la Secretaría de Educación [de Sucre], que se pongan la mano en el corazón. Nuestros niños en el municipio de Guaranda no pueden estar ya en casa, es el derecho fundamental a la educación», imploró.
Albeiro Morales, rector de la Instegua, contó que las 10 aulas construidas por el contratista del Fondo Adaptación están en un 99 %.
«No han hecho entrega parcial ni total de esta obra. Necesitamos que el Fondo Adaptación solucione y nos entregue estas aulas que tenemos, para nosotros iniciar el proceso con los estudiantes», señaló.
Los padres de familia han optado por no enviar a sus hijos a clases porque en el colegio les tocaba sentarse en el piso, pues las aulas tampoco tienen sillas. Solo queda el mobiliario viejo, arrumado en uno de los salones.
Andrés Felipe Rojas, párroco de Guaranda, también llamó la atención del Gobierno y mostró su apoyo a la decisión de los padres de iniciar por su cuenta las clases la próxima semana con o sin sillas.
Los afectados aseguran que han pedido a la Gobernación que, por lo menos, aplace el inicio del año lectivo hasta que les entreguen las aulas, pero eso tampoco lo han conseguido