Abolieron los padrinos en los bautizos de tres diócesis de Italia
A falta de acompañamiento y de una desatención de los padrinos y madrinas en el crecimiento espiritual de los ahijados, el obispo de tres diócesis de la provincia de Caserta, en el sur de Italia, ha decidido suspender por tres años la presencia de padrinos y madrinas en bautizos y confirmaciones.
Ante la abolición de padrinos que solo se cumplirá en esas jurisdicciones eclesiásticas y no para la iglesia universal, consultamos al sacerdote Andrés Campo, experto en Derecho Canónico y canciller diocesano.
“Ellos por decreto episcopal han establecido en estas jurisdicciones eclesiásticas porque han visto que la figura del padrino ha quedado en formalismo y costumbre social, ahora bien el derecho canónico, en el canon 872, no obliga como tal a los padrinos sino que manifiesta en la medida de lo posible acompañe al bautizado con un padrino o una madrina o ambos”, manifiesta Andrés Campo, sacerdote de la Diócesis de Sincelejo.
Con la iniciativa católica en esas diócesis se está empezando a revaluar la función del padrino en los ahijados que se bauticen o reciban el sacramento de la confirmación, para determinar qué tan favorece es el papel de los tutores espirituales en la vida de sus apadrinados.
“Reevaluarlo porque es su función, como tal está reduciéndose únicamente a un acto social y no están viendo aquello que deberían ser, que sería acompañar a los niños y jóvenes en la fe, y buscar que los ahijados desde la fe, tengan una vivencia con Jesucristo en la iglesia”, expresa, Andrés Campo, sacerdote de la Diócesis de Sincelejo.
La iniciación cristiana que empieza desde el bautismo, consiste en ayudar a que los niños empiecen a conocer mejor la razón por la cual existe un Dios, que nos ama y nos salva, a quien le debemos honra y honor en la fe católica desde la comunidad de la iglesia.
“Es decir iniciarlos a ellos en la fe, sería darles a conocer tanto intelectualmente como experiencial la propuesta salvadora de Jesucristo, porque la iglesia eso es lo que hace, en el fondo busca salvar a los niños y a toda la humanidad llegar al conocimiento de la verdad y los valores evangélicos por los cuales Cristo se entregó a la humanidad”, proclama, Andrés Campo, sacerdote de la Diócesis de Sincelejo.
La propuesta del Monseñor Giacomo Cirulli, entrará en curso a partir del 9 de abril, día en el que los feligreses católicos celebrará el domingo de resurrección y el cierre de la semana santa.
La iglesia católica manifiesta que el bautismo es una herencia y un testamento que a lo largo del tiempo se ha confirmado en una tradición que se asumió como costumbre por los años, sin embargo la desatención de los padrinos en el acompañamiento anímico de sus ahijados puede perturbar la fe que entra por los oídos a falta de la palabra de Dios en el crecimiento espiritual.